Si estás pensando en crear tu proyecto digital, seguramente te estés preguntando qué tipos de web existen y cuál es más recomendable y rentable para tu situación actual.
A lo largo de este artículo, quiero explicarte los tipos de páginas web que existen y cómo elegir en función a tus necesidades y objetivos, para maximizar el tiempo y la inversión de tu proyecto.
Antes de comenzar a exponer los distintos tipos de web, quiero hacer una clasificación genérica y una explicación de conceptos que tienden a confundirse.
Es importante que conozcas los tipos web que existen para decidir, según tu objetivo, el sitio web que más se ajuste a tus necesidades.
Comencemos por entender la diferencia entre página web y sitio web.
A menudo, el concepto página web y sitio web se suelen confundir, utilizando ambos términos de forma errónea y con el mismo significado para referirse a una website.
Entenderás en seguida la diferencia.
Una página web es un contenido que se encuentra accesible en internet, bajo una URL o dirección única.
Cada página o artículo que forman parte de una web tiene su propia URL para acceder a ella.
Ejemplo de página web
Dentro de mi sitio web sylviaroldan.com, una página web sería este artículo en el que te encuentras ahora y que tiene por URL o dirección única:
sylviaroldan.com/tipos-de-paginas-web
Otro ejemplo de página web es aquella que tiene un menú de navegación, donde cada uno de sus enlaces recorren distintas secciones de la misma página, dentro de la misma URL.
Un sitio web es un conjunto de información organizada en distintas páginas web, interrelacionadas entre sí, que se encuentran bajo un dominio o subdominio de internet, por el que se navega a través de hiperenlaces o hipervínculos, que te permiten ir de una página web a otra, dentro del mismo sitio web.
Siguiendo con el mismo ejemplo.
Ejemplo sitio web
El sitio web sería sylviaroldan.com, el cual está compuesto por un montón de páginas web: la página de inicio, sobre mí, contacto, páginas de venta y suscripción y artículos, cada una de ellas, con una dirección de acceso o URL única, pero dentro del mismo dominio sylviaroldan.com
Sigamos con otra clasificación básica, la diferencia entre página web estática o dinámica.
Un sitio web puede estar formado por distintas páginas web, unas estáticas y otras dinámicas, en función del objetivo que debe cumplir cada una de ellas.
Dentro de mi web no existen páginas web estáticas, puramente dichas, ya que de una u otra forma, interactúo contigo ofreciéndote contactar conmigo de distintas formas, pero pongamos un nuevo ejemplo.
Imagina que estás comenzando y aún no tienes desarrollado un producto o servicio para tu público de marca, ni estrategias de monetización o suscripción, pero quieres mostrar tus trabajos en un portfolio y comenzar a crear reputación digital con un blog de marca, para posicionar en Google tus contenidos y empezar a generar tráfico.
Una página web estática es aquella que muestra información al usuario pero no le permite interactuar, es decir, no puede comentar, suscribirse, comprar o realizar acción alguna con el contenido de esa página.
Ejemplo de página estática
Un portfolio de trabajos donde el usuario puede ver tu catálogo de trabajos realizados, sin realizar ninguna otra acción.
Una página web dinámica ofrece información a la visita web y también le autoriza a realizar operaciones como comprar un producto o servicio, dejar un comentario, suscribirse a una lista de email, compartir el contenido, etcétera.
Ejemplo de página dinámica
Artículos en tu blog donde permites al usuario leer los contenidos y también dejar un comentario u opinión.
Resumiendo, una página estática no interactúa con la visita y la dinámica sí.
Otra clasificación importante es la diferencia entre web de marca personal y web corporativa.
La principal diferencia entre web de marca personal y corporativa es el tipo de posicionamiento que veremos a continuación.
En ambos casos, deberán mostrar toda la información relevante para el usuario, es decir, datos del individuo o equipo que forma la marca, sus valores, su misión y visión, su oferta, el contacto y todos aquellos contenidos que resulten de importancia para la visita web.
Un sitio web de marca personal te identifica y posiciona como experto de forma individual, es decir, el producto eres tú mismo, tu conocimiento y tu experiencia.
Dicho de otra manera, una web de marca personal es un proyecto donde creas reputación y posicionamiento bajo tu nombre y apellido, es tu curriculum online, la web que te posiciona como experto en Google, para nuevos clientes o empresas que buscan un perfil como el tuyo.
Ejemplo de web personal
Mi sitio web sylviaroldan.com, donde trabajo, posiciono y comparto mis conocimientos y experiencia como diseñadora y consultora web estratégica.
Trabajar tu marca personal no implica que no puedas tener distintos sitios web de marca comercial, asociadas a tu marca personal.
Por ejemplo, puedes tener una web de marca personal y una escuela online con un nombre comercial y una web totalmente independiente.
Una web corporativa es aquella que posiciona los productos o servicios de una empresa y toda la información relevante sobre la marca.
Ejemplo de web comercial
La web de Adidas, Zara o cualquier otra web comercial corporativa.
Conocer el propósito del proyecto, junto con el objetivo, es vital para saber el tipo de proyecto que necesitas.
Si eres un profesional que quieres convertir tu propio conocimiento en un negocio digital, que posicione y monetice tu experiencia, lo más recomendable es crear un sitio web de marca personal.
Independientemente de la salida que quieras dar a tu marca personal, al posicionarte como experto en Google, aumentarán las oportunidades de generar clientes para tu marca, si decides trabajar por cuenta propia, o de ser contratado por empresas de tu sector.
Si tu finalidad es vender productos o servicios, sin promover tu curriculum o expertise en internet, apuesta por una web corporativa.
En ambos casos, el proceso de análisis, diseño e implementación de las estrategias digitales es prácticamente el mismo en los dos desarrollos web.
Existe otro tipo de website, denominadas web nicho, muy interesantes de incluir, en mayor o menor medida, en un proyecto web.
Las llamadas web nicho o TSA, son sitios web orientados a la monetización «pasiva», utilizando el marketing de afiliación con Amazon y publicidad de pago con Google AdSence.
Entrecomillo el término pasivo porque para conseguir resultados, necesitas crear y posicionar artículos de reseña de producto, que requieren una inversión de tiempo o dinero.
Una vez realizada dicha inversión, puedes ganar dinero de forma continua e ilimitada, pero siempre tendrás que trabajar y medir su posicionamiento y crecimiento.
Tanto si eres marca personal como comercial, el blog de marca es clave para generar tráfico a una web y crear reputación y credibilidad de marca.
Te explico los motivos.
Una página o artículo de una web solo puede posicionar para una palabra clave y sus derivadas o relacionadas semánticamente con ella, siempre que la intención de búsqueda sea la misma.
Si tienes un sitio web compuesto de 5 páginas, solo recibirás tráfico de esas 5 páginas.
Al tener un blog, cada artículo nuevo que publicas, genera nuevas visitas a tu proyecto de usuarios cualificados, puesto que, llegan a dicho artículo por una consulta realizada en Google.
Los artículos pueden tener finalidades distintas, según centres el contenido para crear reputación de marca, tráfico o ventas directas.
Las tiendas online también las podemos clasificar según su finalidad y objetivo.
Las tiendas de infoproductos o productos digitales sirven para vender tu conocimiento en distintos formatos.
Por ejemplo, la venta y reserva de consultorías, eBooks, plantillas o cualquier otro contenido digital, que el usuario reserva o compra y descarga en el momento.
Tiendas online de venta directa de productos físicos de tu negocio digital.
Independientemente del objetivo inicial que tengas, todas las acciones digitales que lleves a cabo deberían buscar generar credibilidad de marca, tráfico de clientes interesados en tu oferta y venta directa e indirecta de productos, con el fin de maximizar siempre los resultados.
Vamos a ver los distintos objetivos y el tipo de web más recomendable para cada caso.
Generar credibilidad de marca es el primer paso para cerrar ventas online, el usuario necesita primero creer en tu marca y producto.
Para este objetivo, te recomiendo comenzar a posicionar tu conocimiento y experiencia en Google, con un blog de marca, creando contenidos basados en las necesidades e intenciones de búsqueda de tu público objetivo, previamente analizado.
Otro objetivo puede ser incrementar el tráfico de usuarios, previamente cualificados, para vender tu oferta o productos de terceros.
Puedes incrementar el tráfico de tu web con tu blog de marca donde realices actualizaciones de contenidos ya publicados, creación y optimización de nuevos contenidos, nuevas páginas web o landing page destinadas a campañas de pago.
En este caso, necesitarás primero crear e implementar una estrategia de suscripción en tu web, con una landing page o página web destinada para este fin, conectada a tu gestor de emails, para fidelizar al usuario con contenidos relevantes y de calidad.
Si buscas vender productos digitales o físicos, necesitas una tienda online, comercial o personal, donde optimices las página de venta de cada producto, para generar tráfico de clientes interesados, que te permitan incrementar las oportunidades de venta.
Quiero ponerte algunos ejemplos, según lo que yo misma haría y lo que recomiendo a mis clientes, dependiendo de distintas situaciones, puesto que, al no conocer los detalles de tu proyecto, es más difícil generalizar con tantas posibilidades que existen para crear tu proyecto web.
Si no tienes nada publicado, te recomiendo que realices una análisis básico e inicial de tu sector en el mercado, estudiando a tu competencia, creando tu diferenciación, conociendo a tu público y sus necesidades, descubriendo cómo te buscan en Google y qué contenidos demandan.
Una vez tengas este primer análisis, que irás mejorando con el tiempo, comienza a crear artículos que generen tráfico de calidad y te vayan posicionando en Google como marca.
Los propios artículos y su medición te va a ayudar a perfilar tu primer análisis de mercado.
Un sitio web no tiene sentido crearlo hasta que tengas desarrollado una buen producto o servicio, que ayude a mejorar o transformar la situación actual de tu público objetivo y, para ello, primero necesitas conocer sus necesidades y objeciones, para adaptar la oferta a la demanda del mercado.
Doy por hecho que ya tienes tu estudio de mercado, la arquitectura SEO correcta, los contenidos de las páginas optimizados para posicionar en buscadores y estás analizando los datos que te proporciona Google con sus herramientas.
El siguiente paso es empezar a crear tu estrategia de SEO de contenidos, basados en las intenciones de búsqueda de tu target (público de marca) y escribir artículos de calidad con frecuencia.
Puedes escribir artículos de unas 1.000 o 1.500 palabras, dejar que Google hable e ir incrementando el número de palabras en intervalos de 3 meses.
De esta forma podrás ir más rápido y mejorar tu posicionamiento en Google, manteniendo actualizados todos tus contenidos.
Si ya tienes un blog que genera resultados de tráfico cualificado, llega el momento de ampliar o hacer crecer tu proyecto con las páginas web típicas de una website: la página de inicio, sobre mí, servicios o contacto.
Comienza por establecer la raíz SEO de tu proyecto, esto es, la palabra clave principal de tu negocio y crea la estrategia de posicionamiento de tu negocio digital.
Si quieres tener una web profesional que monetice tu oferta, necesitarás jerarquizar los contenidos correctamente, trasmitir tu valor con textos retóricos o persuasivos bien estructurados, fotografías y gráficos de calidad, hablar a tu público de marca desde los beneficios de tu oferta, crear tu páginas de venta, etcétera.
Si tienes un producto o servicio que quieres promover y vender en canales digitales, necesitas una web estratégica, que analice el mercado y diseñe una estrategia digital rentable para tu marca.
Para que tu web de marca personal o comercial pueda cerrar ventas, tu web necesita trasmitir quién eres y el valor de tu oferta al público correcto, justo en el momento que lo está buscando.
Antes de diseñar, necesitas analizar y comprender el mercado para:
Analizar tu competencia para crear nuevos puntos de diferenciación que te ayuden a destacar en el sector.
Sin estas premisas, tu web se pierde entre 189 millones de sitios web activos que existen en internet.
Dependiendo de la funcionalidad y finalidad del proyecto, existen otros tipos de páginas web como foros, directorios, buscadores, sitios web de noticias, revistas, etcétera.
Todo dependerá del público al que va enfocado el proyecto y el objetivo de cada sitio web.
Creo que antes de comenzar a diseñar tu proyecto digital es necesario que tengas claro el propósito y objetivo que tienes con él, para poder decidir el tipo de web más rentable que cumpla con tus necesidades.
Ten en cuenta que tu meta y objetivo puede requerir una estrategia digital que mezcle distintas tipologías web.
✍🏻 ¿Te ha resultado fácil el artículo? Te leo en comentarios.
Sylvia Roldán
Creativa hasta la médula, apasionada del emprendimiento estratégico, friki de mi soledad que me permite conocerme y disfrutar de mi misma, hater de los haters que escupen sus frustraciones internas, fiera protectora del pensamiento individual y crítico, antidoctrinas y enemiga del marketing acosador, luchadora, perseverante y con una sed insaciable de conocimiento, que solo calmaré el día que muera.